El 85% de las personas dicen que lo primero que observan en una persona es su sonrisa. Si no te gusta tu sonrisa o si tus dientes presentan manchas o fracturas, están descoloridos, desgastados, desalineados, rotos o hay espacios entre ellos, la odontología estética moderna te puede ofrecer la sonrisa perfecta. Un “retoque” mejora la apariencia de tu sonrisa a través de uno o más procedimientos estéticos. Sin embargo, conviene tenerlo muy claro.
¿Qué es la odontología estética?
La odontología estética tiene como objetivo mejorar la apariencia de los dientes y de las encías corrigiendo ciertas imperfecciones a través de rehabilitaciones y restauraciones de las piezas dentales dañadas. Además, hoy en día los dentistas disponen de una gran variedad de técnicas y herramientas para crear una sonrisa atractiva. La más famosa para ver cómo quedaría tu sonrisa después de un tratamiento es el diseño de sonrisa que analiza las características de tu rostro para ofrecerte una sonrisa como la de los famosos.
¿Cuáles son los tratamientos más comunes de la odontología estética?
Cuando hablamos de odontología estética nos referimos a aquellos tratamientos que mejoran los dientes visibles al sonreír. Antes de elegir un tratamiento, sería conveniente informarse de las ventajas y desventajas de cada uno de ellos, los precios, la experiencia del dentista y el mantenimiento al finalizarlo. Los más frecuentes son:
Blanqueamiento dental – mejora el color de los dientes
El blanqueamiento dental es el procedimiento de la estética dental más común en los últimos años. Con el tiempo, los dientes se pueden manchar o descolorar, especialmente después de fumar, tomar ciertos medicamentos o consumir alimentos y bebidas como café o té. Tu dentista puede realizar el tratamiento de blanqueamiento con tecnología LED en clínica o puede recomendarte un blanqueamiento dental en casa, pero con este último tardará entre 7 y 14 días hasta obtener resultados. Es cierto que existen productos de venta libre, que son más baratos, pero no se garantizan los resultados. Después de este procedimiento, se necesita prestar atención a llevar una higiene bucal correcta ya que la mayoría de los alimentos podrían volver a mancharlos.
Carillas de composite y porcelana – mejora la forma y el color de los dientes
Las carillas cubren la parte frontal de los dientes, cambiando la forma y el color y puede mejorar los dientes que tienen espacios, se han fracturado, roto o desgastado, pero también dientes poco apiñados. Las carillas de composite suelen durar entre 5 y 10 años, mientras que las de porcelana son más caras, pero podrían llegar hasta 25 años con un buen cuidado. Hay casos cuando las carillas pueden ser un procedimiento irreversible, así que hay que consultar opciones antes de tomar una decisión final. Una limpieza diaria adecuada, puede prolongar la vida de las carillas.
Ortodoncia – mejora la posición de los dientes
La ortodoncia no sólo mejora la apariencia de los dientes que están torcidos o apiñados, pero también puede mejorar una maloclusión e incluso, trastornos de las articulaciones de la mandíbula. Hay diferentes tipos de aparatos ortodónticos entre cuales brackets metálicos, brackets de zafiro, brackets linguales, brackets de cerámica brackets policarbonato, pero existe también la ortodoncia invisible basada en férulas transparentes personalizadas que se pueden quitar y poner. Al llevar ortodoncia, la higiene oral es muy importante para que el tratamiento funcione correctamente.
Corrección de las encías – cubrir raíces o reducir el volumen
Hay también procedimientos quirúrgicos que pueden mejorar tu sonrisa. Si las raíces de tus dientes se ven bastante o justo al revés, tus encías cubren gran parte de tus dientes, entonces la odontología estética te puede ayudar. Lo que debes de hacer es consultar a un dentista especializado para aconsejarte y crearte una sonrisa de la que puede estar orgulloso/a.
Reconstrucción dental – reparar parcial o total una pieza dental
La reconstrucción dental es un proceso en el que se aplica un material de composite dental similar al esmalte a la superficie de un diente, se esculpe, se endurece con lámpara fotopolimerizable y luego se pule hasta obtener la forma deseada. Se puede usar en casos de dientes cariados (después de tratar la carie) o que presentan grietas o fracturas minores, devolviendo al diente su funcionalidad y soluciona los problemas estéticos derivados.
Coronas dentales artificiales – devuelve la forma y el aspecto de uno o más dientes
Una corona dental (funda) se ajusta y reemplaza todo el diente cariado o dañado restaurando su forma, tamaño, aspecto y resistencia. Las coronas evitan que un diente débil se fracture, cubren un implante dental, reemplazan obturaciones de gran tamaño y cuando no hay suficiente diente, cubren un diente decolorado o deformado. Las coronas se pueden hacer de metal, porcelana fusionada con metal, resina o cerámica.